***
El día había estado
lento y sumamente tranquilo y Tori lo agradecía bastante, un mes después de
llegar a Great Falls se sentía plena y feliz con el rumbo que había tomado su
vida. Acaricio distraída la pequeña cabeza del gatito en sus manos mientras su
mente se perdía en los acontecimientos de las últimas semanas, cuarenta y ocho
horas después de acoplarse con Ben ella había vivido su primer cambio y juntos
habían corrido por el bosque sin restricciones y ella se había sentido libre y
feliz…
Recordar la barbacoa y
lo bien que lo había pasado hasta que Cindy Meltzer había hecho su aparición
intentando a toda costa llamar la atención de Ben y de todos los hombres
solteros en la reunión, al final se había marchado gruñendo amenazas después de
ser reprendida severamente por John, nunca se debía intentar arrebatar una
pareja cuando esta ya se había acoplado, hacerlo se consideraba traición y si
ella no se quería ver sola y repudiada por la manada más le valdría
comportarse, después de todo esa era una de las reglas más importantes y
sagrada de los cambia formas.
Luego estaba su
conversación con John quien ahora era su alfa oficialmente, había aprendido
mucho en estas semanas sobre sus responsabilidades como Omega de la manada y lo
importante que era que su condición se mantuviera en secreto, si bien el olor
de un Omega era particularmente atrayente para otros Were al ser reclamado su
olor cambiaba y podrían pasar tranquilamente desapercibidos… ahora los únicos
que sabían de su condición y su don eran solo unos pocos, John como alfa por
supuesto, Ben como su pareja y ejecutor de la manada, Liam como médico e hijo
del alfa, los dos betas del alfa Dominic Paxton y Daniel Kell quienes también
habían sido amigos de sus padres y por supuesto el resto de las mujeres de la
familia O’ Brian, para ella aun eran muchas personas pero sabía que todas eran
de entera confianza y eso la dejaba más tranquila.
Cerró los ojos por un
momento al recordar que ahora también sabía la verdadera razón de la muerte
temprana de sus padres, ahora tenía la certeza de que no había sido ningún
accidente y que ellos habían sido emboscados y asesinados… después de la
confesión de su suegro ella había estado furiosa y sin hablarle por dos días y
eso había afectado un poco su relación con Ben y el resto de la familia, así
que ella había visitado la tumba de sus padres en compañía de uno de los betas puesto
que se negaban a dejarla sola en su estado vulnerable por la tristeza y allí
arrodillada frente a las tumbas de sus padres ella había purgado su dolor y
perdonado dejando todo en el pasado.
Extrañaba a sus padres y
los extrañaría siempre pero no estaba dispuesta a guardarle rencor a las
personas que habían intentado protegerla aunque la forma no hubiera sido la
mejor… el pequeño gato se quejo en sus brazos sacándola de sus pensamientos,
acariciándolo por última vez lo dejo en su jaula regresando a su oficina.
Se detuvo en el pasillo
mirando hacia la calle a través de la pared de cristal de la clínica, se
estremeció ligeramente porque la sensación de ser observada no la había
abandonado muy por el contrario parecía haberse incrementado, negando
lentamente empujo esos pensamientos a lo más profundo de su mente en un intento
por olvidarlos. Entro a su oficina quitándose la bata blanca que utilizaba
dejándola en el perchero en la pared al lado izquierdo de la puerta avanzando
hacía su escritorio se desplomo en la silla dispuesta a terminar un par de
informes antes de marcharse.
Amaba trabajar con los
animales y tenía que admitir que a veces se llevaba mejor con ellos que con
algunos humanos, ahora tenia de nuevo a una familia y estaba enamorada de un
hombre maravilloso que correspondía a sus sentimientos, estaba muy agradecida
por los regalos recibidos.
-
¡Hey! – levanto el rostro de los papeles
sobre el escritorio, Michael Nash el asistente de la clínica y único compañero
de trabajo estaba en la puerta sonriente – son las cinco, archive los
expedientes de tus últimos pacientes y ya no hay nadie más ¿Cierras?
-
Alguien tiene una cita hoy uh…
-
Algo de eso hay – no pudo evitar
sonreírle, Michael era humano y desconocía por completo el secreto de Great
Falls pero era el mejor asistente que hubiera tenido nunca, sincero, leal,
risueño y divertido… con solo diecinueve años ya proyectaba el buen hombre que
sería en el futuro .
-
Bien, solo termino este par de
expedientes nuevos y me voy…
-
¡Genial! Nos vemos mañana – lo observo
salir en silencio, volvió a centrarse en las carpetas en su escritorio terminando
algunas anotaciones… se movió hasta el archivador guardando las carpetas,
estaba agradecida con su predecesor por dejar todo tan bien organizado porque
gracias a ello no le había costado nada adaptarse al nuevo ritmo de trabajo…
estaba por entrar de nuevo a su oficina cuando el ruido de las campanas de la
puerta de entrada la hicieron detenerse, alguien había entrado o salido de la
clínica.
-
¿Michael? – el silencio fue abrumador,
se movió con lentitud por el pasillo hacía la entrada – ¿Michael, eres tú?
¿Olvidaste algo? – no hubo respuesta, sus sentidos se despertaron alertas ante
cualquier movimiento… al llegar al vestíbulo reviso lentamente el lugar, sus
ojos y oídos en completa vigilancia pero solo estaba ella bueno tal vez solo lo
había imaginado, debía reconocer que últimamente estaba algo paranoica. Se giro
para volver a la oficina por sus cosas ya era hora de volver a casa pero no
llego mas allá de un par de pasos.
Cindy estaba allí en el
pasillo impidiendo su paso, sus ojos negros refulgiendo de odio mientras la
miraba sonriendo con suficiencia… sus ojos se agrandaron al mirar al hombre que
se acerco desde atrás por el pasillo abarcando todo el espacio, la sonrisa
cruel que le dirigió no presagiaba nada bueno, su corazón se acelero con fuerza
y sus manos comenzaron a sudar, necesitaba desvestirse para cambiar y
defenderse porque estaba más que segura que la única persona que no era un
cambia formas en la habitación era Cindy.
-
Te traje un regalito Victoria – la burla
era palpable en la voz de la otra mujer, estaba claro que gozaba con lo que
estaba pasando – vamos a dar un paseo, uno que nunca olvidaras – avanzaron
hacía ella, instintivamente avanzo hacía atrás buscando alguna vía de escape
pero una enorme mano cubrió su boca y nariz, lucho dentro del férreo abrazo
intentando liberarse pero sus esfuerzos fueron inútiles solo sintió el pinchazo
en su brazo derecho antes de que todo se volviera oscuridad.
***
Lobos enormes devoraban
distancias a gran velocidad por el espeso bosque liderados por un enorme lobo
negro y el otro de un color marrón intenso, alfa y ejecutor, padre e hijo, una
hora atrás habían recibido la visita de dos cambia formas renegados que tenían
una información valiosa que entregar… Jasón Piers era quien lideraba el grupo de
renegados que estaban atacando la ciudad, sabían que Victoria era una Omega y
había un traidor dentro de la manada.
Ben había corrido a la
veterinaria para asegurarse que Tori estuviera segura pero solo había
encontrado su bolso dentro de la oficina y rastros fuertes de lobos que no
pertenecían a la manada, pero fue el rastro de Cindy mezclado con el de los
Were lo que enfureció más aun a Ben ¿Por qué esa estúpida mujer no podía
dejarlos en paz? Se sentía culpable puesto que había sido él quien se había involucrado
con esa ella, se desviaron en el camino siguiendo al lobo gris que era Burt divisando
la cabaña en medio del claro.
Debían actuar rápido
antes de que hicieran más daño del que ya habían provocado, por lo menos tenían
de su lado el elemento sorpresa… avanzaron con total sigilo rodeando la casa,
una veintena de lobos acercándose y aguardando al momento indicado. John aulló
con fuerza desplegando todo su poder como alfa…
Entonces exploto el
caos… los lobos se dividieron y atacaron a dos de los tres lobos dentro de la
cabaña sacándolos hacia fuera y neutralizándolos sobre el suelo sin darles si
quiera oportunidad de defenderse. Jasón salto por la ventana gruñéndole al alfa
de la manada, desafiándolo mientras le enseñaba los dientes pero John lo ignoro
por completo y el desafío fue respondido por el lobo negro a su derecha después
de todo la afrenta había sido contra este y su compañera… Se enzarzaron en una
pelea a muerte llena de garras y dientes, Jasón golpeo el costado derecho del
Ben clavándole las garras y los dientes en la piel tumbándolo al suelo aplastándolo
con su peso y por un momento solo hubo silencio, Jasón Piers ya se proclamaba
el vencedor…
Pero en un veloz
movimiento el lobo negro cambio los papeles arremetiendo con más fuerza contra
Jasón sin que él pudiera evitarlo, clavándole los dientes profundamente directo
en el cuello, lo mantuvo sobre el suelo sin soltar su presa mientras este
gimoteaba intentando escapar pero solo consiguió moverse un poco antes de
exhalar su último aliento, el enfrentamiento había terminado.
Habían cometido el
error de creerse superiores intentando desestabilizar el equilibrio de la
manada y su tranquilidad, tan tonto y cegado por su ansia de poder Jasón Piers
se había atrevido a tomar a la fuerza a la compañera del ejecutor y sucesor de
la manada y eso era inadmisible… ahora estaba muerto, sus subordinados estaban
mal heridos completamente neutralizados y terminarían sus días en la cárcel, la
traidora estaba muerta, asesinada por sus propios socios un acto abominable que
solo reafirmaba su falta de lealtad y espíritu.
***
El dolor de cabeza la
saco la saco del embotamiento en el que estaba sumergida sentía el cuerpo
entumecido, se removió sobre la suave superficie en la que estaba parpadeando
repetidas veces en un intento por enfocar la vista mientras se incorporaba con
dificultad recorriendo el lugar en el que estaba… a su mente acudieron
claramente los recuerdos de lo que había sucedido pero estaba en la habitación
que había ocupado en casa de los O’ Brian antes de que se mudara con Ben
definitivamente ¿Qué había sucedido? ¿Cómo había llegado allí?
-
Es bueno ver que estas despierta cielo –
se giro con violencia hacía la voz siseando cuando la punzada de dolor en su
cabeza aumento, en la puerta estaba Eileen sonriéndole apacible en sus manos
una pequeña bandeja con un vaso de agua en ella.
-
¿Qué paso?
-
Bueno, fuiste secuestrada por el primo
de John y rescatada
-
Secuestrada, lo recuerdo ¿Cómo me
encontraron?
-
Pues bien – le entrego una pastilla
blanca y el vaso de agua mientras se sentaba en la orilla de la cama – Burt y
Trey decidieron contar todo lo que sabían, Ben y John te buscaron en la
veterinaria pero ya no estabas allí…
-
Cindy ella… ¿Quiénes son Burt y Trey?
-
Ya lo sabemos, lamentablemente confió en
las personas equivocadas… está muerta al igual que Jason Piers – Tori se tomo
la pastilla mientras escuchaba las novedades de la boca de su suegra, no pudo
evitar sentir alivio y pesar al mismo tiempo…alivio porque la pesadilla hubiera
terminado y pesar porque nadie merecía morir, toda vida era preciosa – y Burt y
Trey son dos encantadores jovencitos que dieron la información necesaria para
rescatarte… bien, Liam te examino mientras dormías ayer cuando te trajeron
drogada…
-
¿Ayer? ¿Cuánto he dormido?
-
Unas veinte horas, son casi la una de la
tarde… la droga que te dieron era muy potente y cambia formas o no seguimos
siendo humanos y no somos inmunes.
-
Lo sé… ¿Dónde está Ben?
-
Abajo en el despacho de John…
-
¿Crees que pueda…?
-
Sí, pero primero date un baño te
sentirás mucho mejor… voy a prepararte algo liviano para comer – Eileen salió
de la habitación dejándola sola, ella no tenía hambre precisamente solo quería
darse una ducha y buscar a Ben… El agua caliente relajo su cuerpo agarrotado y
también termino por despejar por completo su mente dejándola ver claramente
todo lo que había sucedido con mayor lujo de detalles y no le gustaba la
sensación de sentirse débil y vulnerable. Conocía la historia de la madre de
Jasón Piers y la razón por la que había sido repudiada de la manada y no
entendía como él podía justificarla e incluso tomar eso como una razón válida
para lastimar a los demás.
La madre de Piers se
había embarazado de un Were renegado y luego se había presentado en la boda de
una recién acoplada pareja alegando que el novio era el padre de su bebe, el
consejo había suspendido la boda y pedido que se investigara la situación
después de todo era importante proteger a los descendientes de la manada. Pero
todo había resultado en engaño, un intento burdo por quedarse con la pareja de
otra mujer a pesar de que ya se habían acoplado, la novia se había suicidado
presa del dolor y el novio había muerto de tristeza por no tener a su compañera
así que ella había sido repudiada y lanzada fuera de la manada como una paria,
su envida y ambición habían sido su perdición… años después el padre de John
había salvado al pequeño Jasón de las manos de su padrastro después de todo era
familia y el no era culpable de los pecado de la madre, al parecer a él eso no
le había parecido suficiente y quería vengarse de lo que él pensaba era una
injusticia… ahora estaba muerto por algo tan absurdo como desafiar a la familia
O’ Brian por un poder al que no tenía derecho…
Cuando salió de la
ducha había ropa acomodada sobre la cama y un sándwich con un vaso de leche en
la mesita de noche, se enfundo en unos pantalones de yoga grises y una franela
blanca completando el cómodo atuendo con los tenis que estaban al pie de la
cama y asumía que eran de Kyra, devoro la comida con rapidez no deseando ser
grosera despreciando a Eileen y tomándose de un solo trago la leche se apresuro
a salir de la habitación escaleras abajo… ansiaba ver a Ben de una vez por
todas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario